En varias ocasiones ya hemos hablado en este blog, y además en alguna entrada, hemos descrito la manera de realizar algún hechizo o algún ritual determinado. Ahora debemos saber que, en aquellas ocasiones en las que un hechizo no ha resultado efectivo, el trabajo de una buena vidente es volver sobre sus pasos y analizar la causa que ha provocado que no se alcance el éxito esperado.
Los errores más comunes suelen ser:
- No definir bien el objetivo del hechizo. Aunque al leerlo parezca imposible, son muchas las veces que se suele olvidar el objetivo principal. Intenta tenerlo muy claro y trata de resumirlo en una sola frase.
- No guardar discreción. No debes de alardear de tus hechizos. En caso de alardear de los resultados o de hablarlo con la persona equivocada se puede volver en contra tuya. El silencio es una virtud.
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